La difícil selección de los platos

(Juan Alonso Molina) Que la cocina tradicional de cualquier región suele constituir un acervo enorme y variado es cosa por demás sabida por todos los curiosos que la hurgan, llámense investigadores, cronistas gastronómicos, cocineros o turistas, ávidos por ampliar el registro de su memoria gustativa.

Así, pues, en esta etapa preparatoria, próxima a la apertura al público de la Ruta Turística Gastronómica Yaracuy: Tierra de Mágicos Sabores, han sido muchas las consideraciones que han tenido que hacer particularmente los propietarios, gerentes y cocineros de los restaurantes participantes, precisamente para escoger las preparaciones con las cuales se van a identificar dentro de la misma. Y no ha sido fácil, sobre todo, porque el muestrario de la cocina tradicional yaracuyana es de una mayúscula riqueza.

Las preparaciones se sirven para poder ser
sometidas a evaluación. 

Y no podía ser de otro modo porque es difícil encontrar otra región del país con una naturaleza tan exhuberante y, como si fuera poco, una composición étnica y una historia llena de muchas vicisitudes que han aportado lo suyo a la diversidad actual de su gastronomía. Si a eso sumamos que su economía es principalmente agropecuaria y su industria es sobre todo agroalimentaria, ya podemos ir entendiendo la magnitud de esa riqueza.

Afortunadamente, la colaboración de todos los miembros de la Ruta, con sus observaciones y sugerencias, ha venido rindiendo sus frutos y ya los restaurantes afinan los últimos detalles de las versiones que han venido elaborando del extenso recetario tradicional. ¿Qué cuáles son? ¡Sorpresa! En todo caso, prepárense para visitarlos a partir del domingo 27 de septiembre y satisfagan su curiosidad. No lo lamentarán.